En verano aumenta la temperatura y puede ser más difícil de sobrellevar sin aire acondicionado.
Esto puede convertirse en un auténtico reto en los áticos, ya que el tejado es la zona más expuesta a los rayos del sol y las temperaturas extremas.
Por eso es fundamental que sepas ofrecer a tus clientes alternativas para bajar los grados del ático de forma natural, económica y ecológica.
¿CÓMO CONSEGUIR UNA TEMPERATURA AGRADABLE EN UN ÁTICO?
1. AISLAMIENTO TÉRMICO
El tejado es una zona por donde se pierde energía y es la zona más expuesta a los rayos del sol en verano, por lo que resulta necesario un aislamiento eficaz. Por un lado, necesitarás un buen material aislante en las cámaras de aire, paredes o falsos techos y, por otro, unas ventanas de tejado en buen estado y eficientes. Por tanto, renovar las ventanas estaría entre las recomendaciones clave que hacer a tu cliente.
2. POR EL DÍA, VENTANAS CERRADAS
Evita que el calor entre en la casa cerrando las ventanas, especialmente en las horas de máximo calor, entre las 12 y las 17h. Con este sencillo gesto, la temperatura bajará hasta 6 grados.
3. BUSCANDO LA SOMBRA
Durante el día, es muy importante dejar entrar la menor cantidad de luz posible para que la radiación solar no incida sobre las superficies del vidrio y se produzca el llamado efecto invernadero. Bajar las persianas detendrá hasta el 87% del calor.
¿ES POSIBLE APROVECHAR LA VENTILACIÓN NATURAL?
4. Y POR LA NOCHE… ABRIR DE PAR EN PAR
Cuando el cielo se oscurece y bajan las temperaturas es el momento de abrir las ventanas para dejar que entre el aire fresco y que circule por todo el espacio.
5. VENTILACIÓN NATURAL
Reducir la temperatura de un espacio bajo cubierta es posible sin el uso del aire acondicionado, bastará con manejar adecuadamente las corrientes de aire generadas por la apertura de las ventanas. Prueba a abrir las ventanas de tejado en paredes opuestas para conseguir una ventilación cruzada o bien, logra un efecto chimenea, abriendo una ventana del primer piso y a la vez, otra del piso superior: el aire frío ejercerá presión bajo el aire caliente forzándolo a subir y el aire caliente se evacuará, bajando hasta 3°C la temperatura.